El secretario de Hidrocarburos de Tierra del Fuego manifestó su preocupación por el declino de inversiones de la empresa de mayoría estatal.

“Estamos viendo una declinación de inversiones por parte de YPF y eso nos preocupa. Queremos saber si se va a quedar o si se va a ir”. Así lo aseguró el secretario de Hidrocarburos de Tierra del Fuego, Alejandro Aguirre, sobre la situación de la empresa de mayoría estatal en la isla.

En diálogo con Radio Nacional, el funcionario fueguino manifestó que “en el 2016 se inicia una campaña activa de inversiones. Se hicieron varios pozos en el 2016 teniendo en cuenta que en Tierra del Fuego no se hacían pozos hacía cuatro o cinco años en la cuenca. La región no tiene una gran cantidad de pozos activos. Estamos hablando de 250 pozos activos contra 18 mil que tiene Neuquén. Un pozo aquí representa un movimiento importante en la inversión. Esos pozos no fueron éxitos y, a partir de 2018, se comienza a ver una caída de inversiones y, a fines de 2019, con la rotura de la monoboya, YPF comienza a retraer sus inversiones. Ahí comienza a ver una caída de actividad”, aseveró.

“La reparación de monoboya duró más de un año y costó aproximadamente 9 millones de dólares y al analizar lo que sacan de crudo, las ganancias no eran las esperadas”, aseveró y detalló que “es difícil de colocar nuestro crudo en los mercados porque tiene mercurio y es un petróleo de los pesados dentro de los livianos. Eso afectó la economía local de YPF”.

Aguirre dijo que este año comenzaron a ver los niveles de inversiones que se esperaban en Tierra del Fuego y encendieron las alarmas. “Sabemos que las inversiones se van a Vaca Muerta porque la actividad lo demanda, pero queremos saber si YPF quiere desprenderse de los activos en Tierra del Fuego”, destacó.

“Lo que vamos viendo es que aumentan los incidentes ambientales. Hay una norma que dice que más de 5 metros cúbicos de petróleo en el suelo es un incidente mayor. Marca un descuido de la empresa”, aseveró.

“YPF no paga las multas. Buscamos revertir esta situación. Es la empresa de bandera y la que nos brinda gas. Ha comenzado la declinación de las inversiones y estamos haciendo todo lo posible para que YPF revierta esta situación y que blanqueé si quiere permanecer en la isla o no”, determinó.

A esto hay que sumarle que “hay una sangría de gerencias”. “Hoy dependen las decisiones de la regional de Comodoro Rivadavia. Tenemos que esperar que nos dicen desde Comodoro. Hemos hablado con los dos gremios y ellos tienen los mismos problemas”, cuestionó.