Nación quiere cambiar el cálculo del ICL por un porcentaje y no un monto fijo atado al IPC

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La nueva metodología que se impulsará contempla la aplicación de un porcentaje directo sobre el precio de venta, de manera que varíe sólo si hay un incremento o una baja de los combustibles, pero no en función del costo de vida.

El Gobierno nacional impulsará un cambio en la implementación de Impuesto a los Combustibles Líquidos (ICL), con el objetivo de dejar atrás el actual efecto indexatorio, al pasar de un monto fijo vinculado a la evolución del costo de vida a un porcentaje fijo que se aplicará sobre el valor del litro de combustible.

El cambio está contemplado en el proyecto de ley de Promoción de Inversiones Hidrocarburíferas que el Poder Ejecutivo remitirá al Congreso en los próximos días, y que incluye una revisión de la aplicación de ICL dispuesta en 2018 durante la gestión Cambiemos, informaron fuentes oficiales.

La propuesta es dar de baja el actual esquema de aplicación del Impuesto a las naftas y el gasoil, basado en montos fijos en pesos por unidad de medida, que son de actualización trimestral sobre la base de las variaciones del Indice de Precios al Consumidor (IPC) .

La nueva metodología que se impulsará contempla la aplicación de un porcentaje directo sobre el precio de venta, de manera que varíe sólo si hay un incremento o una baja de los combustibles, pero no en función del costo de vida.

En la actualidad, los montos fijos se actualizan por trimestre calendario en enero, abril, julio y octubre de cada año, y desde su aplicación para evitar impacto inflacionario sufrió desdoblamientos y postergaciones en su aplicación.

“Buscamos pasar a un esquema porcentual, directo y más simple tanto para la Secretaría de Energía y el Ministerio de Economía como para el esquema de aplicación que depende de una resolución periódica para su actualización”, explicaron fuentes del Ministerio de Economía.

En ese sentido, destacaron que “la transformación del actual esquema de variación de impuesto liquido también saca indexación que pude generar espiralización inflacionaria”

“Buscamos dejar atrás un esquema que se actualizaba con el IPC que implementó el gobierno anterior, por el cual cuando subía el IPC, aunque no se registraran aumentos en el precio del combustible, terminaba subiendo por el impacto del impuesto”, argumentaron al explicar las razones del cambio.

Esa situación, aseguraron, “generaba tensión inflacionaria que era importante recortar, por lo que ahora se buscará pasar a una referencia ad valorem”, es decir una tasa que se impone en términos de porcentaje sobre el valor del producto gravado.

Para ello, el proyecto introduce modificaciones a la Ley 23.966 que establece el Impuesto a los Combustibles Líquidos y sus posteriores leyes modificatorias.

La Ley 27.430 de reforma tributaria con vigencia desde 30 de diciembre de 2018, entre otras modificaciones importantes, estableció cambios en lo referente al ICL que lo establece en una suma fija por litro y no porcentual sobre base variable.

También estableció un nuevo impuesto denominado al “Dióxido de Carbono” determinado sobre un valor fijo por litro de combustible gravado pero no computable a cuenta de ningún impuesto.

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