Natalia Laufer y Gabriela Turk analizaron el caso de “Esperanza”, la paciente que en algún momento estuvo infectada con el virus pero de alguna manera logró eliminarlo. ” No se logró encontrar virus activo en más de 1.500 millones de células analizadas”, afirmaron.
Las científicas Natalia Laufer y Gabriela Turk, claves en la investigación de la paciente argentina que tuvo VIH y a quien luego no se le encontró virus viable ni siquiera en los reservorios, contaron a Télam la historia de este ejemplo exitoso de trabajo conjunto entre instituciones de distintos países, en el que el Instituto de Investigaciones Biomédicas en Retrovirus y SIDA (Inbirs) de Argentina dio el puntapié inicial.
La noticia del caso de la paciente “Esperanza” -el nombre con el que ella quiso darse a conocer- tuvo amplia repercusión por tratarse de la segunda persona (la primera fue otra mujer en San Francisco) que logra naturalmente lo que se denomina una “cura esterilizante” del VIH.
Turk y Laufer, ambas del Inbirs que depende del Conicet y la Universidad de Buenos Aires (UBA) y dos de las autoras de la investigación publicada en Annals of Internal Medicine con el caso, explicaron cómo llegaron a esta paciente los estudios que permitieron concluir su condición y las hipótesis que manejan sobre por qué algunas personas podrían controlar la enfermedad sin tratamiento e incluso “eliminar” aparentemente el virus.
🌟Desde el @inbirsar celebramos la publicación del trabajo que describe el caso de una mujer argentina que vive con VIH desde el 2013, pero que ha logrado controlar la replicación del virus sin necesidad de terapia antiretroviral.
Link a la publicación: https://t.co/bbiLuhF1Cd
— INBIRS (UBA – CONICET) (@inbirsar) November 16, 2021