Se trata de una mujer que recientemente había viajado a Sudáfrica y dio positivo con la variante Ómicron. Ahora se encuentra en aislamiento en su vivienda de Santa Cruz do Su, estado de Rio Grande do Sul, al sur del país.
Las autoridades de Rio Grande do Sul, estado sureño de Brasil que limita con la Argentina, confirmaron este viernes el primer caso de la variante ómicron de coronavirus. Se trata de una mujer residente en Santa Cruz do Sul, en el Valle del Río Pardo, que recientemente había vuelto de un viaje por Sudáfrica.
La mujer, que “había recibido las dos dosis de la vacuna contra el COVID-19″, se encuentra aislada en su domicilio y presentó fiebre, de acuerdo con las autoridades regionales de Rio Grande do Sul. Con el nuevo caso positivo se elevan a seis el número de infectados la cepa Ómicron en todo Brasil.
Ahora las autoritarias están en busca de los contactos estrechos que mantuvo en los últimos días para analizarlos.
Tras conocerse la noticia, la secretaria de Salud del municipio, Daniela Dumke, aseguró: “Quiero llevar tranquilidad a la población de Santa Cruz. Hemos dado todos los pasos que nos indican la ciencia y los protocolos mundiales, como el aislamiento domiciliario y las pruebas a todos los contactos”.
Por su parte la secretaria de Salud del estado, Arita Bergmann, llamó a la población a inmunizarse y remarcó que es necesario “que la protección sea efectiva, especialmente con una alta cobertura de vacunación”.
Con 11 millones de habitantes, Rio Grande do Sul es uno de los veintiséis estados de Brasil. Ubicado en el extremo meridional de la región sur del país, el territorio limitan tanto con la Argentina como con Uruguay.
La Ómicron fue detectada y anunciada por Sudáfrica el pasado 25 de noviembre y ha sido incluida en el grupo de “variantes de preocupación” de la Organización Mundial de la Salud (OMS), aunque poco se sabe de ella salvo que parece ser más transmisible que sus predecesoras.
Junto a Estados Unidos y la India, Brasil es uno de los países más castigados por la pandemia de coronavirus, que ya deja en el país sudamericano más de 615.000 fallecidos y 22,1 millones de contagios.