También firmó un acuerdo de entrega a largo plazo con la refinería polaca PKN Orlen SA.
El acuerdo de Saudi Aramco para suministrar casi la mitad del petróleo de Polonia le dará al mayor exportador de crudo del mundo una posición más sólida en una región que los productores rusos han dominado durante mucho tiempo.
Aramco comprará el 30% de una refinería en la costa báltica, así como una unidad mayorista de combustibles. También firmó un acuerdo de entrega a largo plazo con la refinería polaca PKN Orlen SA.
El gigante petrolero propiedad del gobierno saudí aumentará las ventas de petróleo en el patio trasero energético de Rusia justo cuando las dos naciones, que son líderes conjuntos de la alianza de productores OPEP+, trabajan para reducir casi dos años de recortes de producción que implementaron con el inicio de la pandemia
“Nuestra red global en expansión de refinerías y empresas químicas conjuntas nos permite llegar a nuevos mercados con nuestros productos y colocar estratégicamente volúmenes de petróleo crudo en diferentes geografías”, dijo Mohammed Al Qahtani, vicepresidente senior de downstream de Aramco.
El acuerdo podría tener implicaciones más allá de Polonia, ya que Orlen podría utilizar el crudo en refinerías de Lituania y la República Checa. Muchas plantas de Europa del Este se diseñaron para funcionar con el grado de los Urales de Rusia y algunas pueden requerir ajustes técnicos para usar diferentes barriles. El crudo de Arabia Saudí e Irak compite regularmente con los barriles rusos por los clientes.
La alianza OPEP+ de 23 miembros ha reducido la producción desde 2020 para apoyar los mercados petroleros después de que la pandemia obligara a los gobiernos a cerrar las economías, estrangulando la demanda. Ahora, con las economías recuperándose y el petróleo cotizando por encima de los 80 dólares el barril, el grupo está revirtiendo gradualmente esos recortes y volviendo a traer más petróleo al mercado.
La compra de Aramco “ampliará la presencia de la compañía en el sistema de refinación de Europa con una participación en una refinería recientemente mejorada”, escribieron los analistas de Bloomberg Intelligence Salih Yilmaz y Rob Barnett en una nota de investigación. También ayudará a Aramco a “fortalecer su posición en una región tradicionalmente dominada por el crudo ruso”.