El nuevo mecanismo para que los visitantes perciban un mayor tipo de cambio por sus gastos con tarjeta aún no se instrumentó. En el Gobierno hablan de movimientos cambiarios “especulativos”.
Después de tres meses de calma, los dólares financieros se dispararon esta semana. Ayer, el contado con liquidación alcanzó los $331 y el dólar Bolsa los $314. Cada vez que la brecha cambiaria se agranda, se encienden luces de alerta en el equipo económico ya que consideran que esto conspira contra los planes del ministro Sergio Massa para “estabilizar la macro”. Una medida anunciada pero aún no instrumentada podría traer algún alivio en ese frente. Se trata de la liquidación especial para los gastos de turistas extranjeros con tarjeta de crédito. Estiman que podrían sumar oferta en el dólar MEP por unos u$s300 millones mensuales.
En el menú de factores que impulsaron el nuevo salto de los dólares financieros aparece cierto atraso con respecto al avance de los precios. “En términos reales debían estar en los niveles más bajos del año e incluso de los más bajos de esta gestión”, señaló a este medio Leandro Ziccarelli, economista del Centro de Economía Política. En ese sentido, agregó: “Después del dólar soja volvieron los problemas de pesos, es decir que emitimos para rescatar deuda en el mercado, y de dólares, el Banco central volvió a ponerse vendedor. Por último, la depreciación del real brasilero este mes ya acumula un 7,5%”.
Por el lado de los efectos, en el Gobierno lo saben, los comportamientos de los agentes dependen de la dirección de los incentivos. Lo sintetizó esta semana Gabriel Rubinstein. “Todo el mundo quiere dólares, hay empresas que se stockearon por ocho o nueve años. Yo los comprendo, no voy contra la lógica empresaria, aunque no se trata de importar bienes, se trata de importar brecha…”, sintetizó el secretario de Programación Económica.
Con la brecha cambiaria en estos niveles, está claro que cualquiera que pueda anticipar compras a la cotización oficial buscará hacerlo y quien tenga que liquidar sus exportaciones intentará dilatarlo. Esto, por supuesto, perjudica a uno de los ejes centrales que el Gobierno busca consolidar: la acumulación de reservas.
En el mercado, pero también en el Gobierno, siguen de cerca el impacto de una medida que se anunció a comienzos de mes y que todavía no tiene implementación efectiva. La posibilidad de que los turistas extranjeros que visiten el país reciban por sus gastos con tarjeta de crédito o débito la cotización del dólar bolsa y no la del oficial como ocurría esta ahora. Esto haría que los procesadores liquiden las divisas en el MEP.
Hasta ahora, esos dólares estaban yendo al mercado ilegal. Es de esperar que en los próximos días se incremente la oferta en el financiero. Los cálculos del Ministerio de Turismo hablan de unos u$s300 millones mensuales. Pero noviembre y diciembre son temporada alta. Parte de este mes ya está jugado, pero en diciembre esperan unos u$s500 millones.
“Es una cifra muy significativa porque no hay mucha oferta de dólares en plaza”, explicó una fuente del mercado. Sobre este punto, Zicarelli recalcó que “no son dólares extra” y agregó: “Todo lo que consiga el MEP saldrá del blue. Si el MEP baja, seguramente sea porque el blue sube y a más tardar ambos precios van a tender a arbitrarse”.
Ante la consulta de Ámbito, en el equipo económico caracterizaron como “especulativos” los movimientos de las últimas horas. Agregaron que hubo un grupo de bancos que “vendieron bonos y compraron en el mercado secundario”. También señalaron operaciones con fake news que “buscan una devaluación”. Todos los funcionarios consultados se mostraron optimistas con respecto a la posibilidad de garantizar la paz cambiaria.