YPF llegó a un acuerdo extrajudicial con las autoridades de TGN (Transportadora Gas del Norte) para poner fin al litigio económico que mantenían las dos empresas desde 2010.

Según los términos pactados, YPF procederá a pagarle a TGN una “suma transaccional única y total de US$ 190,6 millones en cuatro cuotas anuales a partir de 2024”.

YPF y Transportadora Gas del Norte (TGN) llegaron a un acuerdo para finalizar un litigio, por la cual la transportadora, cuyo principal accionista es Techint, el imperio industrial de Paolo Rocca, le reclamaba a la petrolera que controla el Estado nacional cientos de millones de dólares.

El viernes a última hora, YPF informó a la Comisión Nacional de Valores (CNV) que, “como consecuencia de las complejidades legales y comerciales” que tiene su pelea con TGN, “así como de la existencia de derechos litigiosos, el 3 de febrero de 2023, dichas empresas celebraron una suma transaccional por una suma única y total de u$s 190,6 millones pagadera por YPF en cuatro cuotas anuales, consecutivas, comenzando en 2024, por el que, sin reconocer hechos ni derechos, Transportadora Gas del Norte e YPF desistieron de todos los reclamos que, hasta dicha fecha, tenían o podían tener recíprocamente”.

El origen del conflicto entre YPF y TGN se remonta a fines de 2006, cuando ante la caída de la producción interna de gas, el gobierno que encabezaba Néstor Kirchner decidió cortar las exportaciones que estaban en curso a Chile y Brasil.

Una de las más perjudicadas por esa medida destinada a garantizar el abastecimiento doméstico fue YPF que no pudo cumplir con varios contratos de ventas de gas en firme que tenía acordados con compradores externos.

En abril de 2009, TGN le inició un juicio a YPF para exigir el cumplimiento de un contrato de transporte para exportación de gas y, además, obligar a la empresa -por entonces, todavía controlada por el grupo español Repsol- a pagarle facturas vencidas.

El monto de esa demanda, incluyendo ampliaciones posteriores, asciende a u$s 74,8 millones, en base a las facturas que había emitido TGN en concepto de servicios prestados entre enero de 2007 y diciembre de 2010, más los intereses devengados a cada fecha respectiva y aquellos a devengar hasta que las sumas fuesen canceladas por YPF.

La petrolera respondió que, básicamente, TGN no había cumplido con el transporte en los términos previstos por hallarse en “imposibilidad de cumplimiento”, a patir del dictado normas de emergencia por parte del Gobierno Nacional -que había suspendido las exportaciones de gas dada la insuficiencia de abastecimiento al mercado interno- y, en consecuencia, que no siendo posible exportar fluido, correspondía aplicar una tarifa en pesos.

En diciembre de 2010, TGN dio por rescindido el contrato de transporte en firme de exportación con YPF por incumplimiento del cargador y, en diciembre de 2012, presentó otra demanda, por u$s 142,15 millones. Para entonces, YPF ya había sido expropiada a Repsol por el Gobierno de Cristina Fernández.

Casi una década después, en octubre de 2020, la Justicia hizo lugar a la demanda. Le reconoció el derecho a cobrar una suma a liquidar por una perita contadora en concepto de las facturas impagas, más u$s 231 millones (en esa moneda o en pesos, al tipo de cambio vendedor) por lucro cesante. A esto último, se le debían agregar intereses.

Tanto TGN como YPF apelaron esa sentencia de primera instancia. Hace un año, en febrero de 2022, la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Civil y Comercial Federal confirmó el fallo. La petrolera interpuso un recurso extraordinario. El caso pasó a estar radicado en la Corte Suprema de Justicia de la Nación. Con la firma de este acuerdo, el reclamo se desactivará y ese expediente pasará a archivo.

Operadora de una red de 10.971 kilómetros de gasoductos, entre 6806 kilómetros propios y 4165 de terceros, TGN transporta el 40% del gas inyectado en gasoductos troncales del país, equivalentes al 20% de la matriz energética de todo el país. Su control (56% de su capital) está en manos de GasInvest, sociedad compartida entre Tecpetrol (la energética de Techint) y Compañía General de Combustibles (Grupo Eurnekian y Sociedad Comercial del Plata).

Ambas ampliaron su participación a fines de 2019, luego de que Nicolás “Nicky” Caputo, el hermano del alma de Mauricio Macri, vendiera las acciones que tenía a través de la empresa RPM Gas y se fuera del capital de la transportadora. El 24% es del fondo estadounidense Southern Cone Energy y el 20% restante cotiza en Bolsa. Entre sus accionistas “públicos” está la ANSeS.

La paz TGN-YPF se produce en un contexto en el cual el transporte es la llave maestra para expandir el potencial de Vaca Muerta. Para mayo, es espera la inauguración del Gasoducto Néstor Kirchner, cuyo primer tramo unirá Tratayén (Neuquén) con Salliqueló (provincia de Buenos Aires). Tecpetrol será la mayor proveedora del gas con el que se llenerá ese caño, cuya construcción lleva adelante la constructora de Techint y los tubos provee Tenaris, uno de los músculos siderúrgicos del grupo.

En junio de 2024, finalizaría la construcción del segundo tramo de ese gasoducto, que conectará con San Gerónimo, provincia de Santa Fe. Una obra fundamental para enlazar con el Gasoducto del Norte, operado por TGN y cuya reversión permitirá exportar el gas de Vaca Muerta a Brasil.