En diciembre, el 18% de las importaciones de crudo del bloque provinieron de Estados Unidos, informó el martes la oficina de datos de la UE, Eurostat.
Rusia fue hasta hace poco el principal proveedor de crudo del bloque, representando hasta el 31% de las importaciones totales hasta finales de enero de 2022, según Eurostat. Mientras tanto, EE. UU. ocupó un distante segundo lugar, con una participación máxima del 13%. Pero la invasión de Moscú a Ucrania en febrero del año pasado provocó un trastorno en el suministro de energía de Europa.
Los estados de la UE redujeron sus importaciones de energía de Rusia y el bloque impuso sanciones a las exportaciones de petróleo y carbón del país.
En diciembre, la Unión Europea prohibió las importaciones de crudo transportado por mar ruso e introdujo un precio tope que prohibía a los transportistas, corredores de seguros y otras empresas prestar sus servicios si el petróleo se compraba a más de 60 dólares el barril.
Cuando estalló la guerra, algunos países europeos también comenzaron a reducir sus importaciones de gas natural ruso. Moscú, por su parte, comenzó a cortar los flujos hacia el continente. El gigante energético estatal Gazprom primero redujo las entregas de gas a través del gasoducto Nord Stream 1, que representó alrededor del 35% de las importaciones totales de gas ruso en Europa en 2021. Y en septiembre, cerró el gasoducto citando problemas técnicos.
La participación de Rusia en las importaciones de gas natural de Europa cayó drásticamente, del 31 % en el primer trimestre de 2022 a casi el 19 % a finales de año, según muestran los datos de Eurostat. Eso convirtió a Estados Unidos en el segundo mayor proveedor de gas del bloque, con una participación de casi el 20%, detrás de Noruega, que representa casi el 31% de las importaciones de gas de la UE.
Las exportaciones de crudo de Estados Unidos a Europa aumentaron antes de la guerra, aunque la invasión de Rusia subió la necesidad de aumentar las entregas de fuentes alternativas, dijo Jay Maroo, analista senior del proveedor de datos Vortexa.
Independencia petrolera
Las importaciones de crudo ruso al bloque fueron volátiles entre febrero y abril del año pasado, dijo Eurostat. Pero a partir de septiembre de 2022, disminuyeron gradualmente, hasta representar solo el 4% de las importaciones totales en diciembre.
A fines de año, “los mayores proveedores de petróleo crudo de la UE eran Estados Unidos, Noruega y Kazajstán, lo que demuestra que la UE logró adaptarse al panorama cambiante del mercado petrolero y eliminó virtualmente su dependencia del petróleo ruso”, señaló Eurostat.
Rusia encontró nuevos compradores para su petróleo deseosos de hacerse con los barriles con un gran descuento: el crudo Urals de Moscú se cotiza actualmente a 54 dólares el barril, en comparación con los 78 dólares el barril del crudo Brent, el punto de referencia mundial.
India y China, en particular, intensificaron las importaciones de petróleo de Rusia desde la invasión de Ucrania.
El ministro de Energía de Rusia, Nikolai Shulginov, advirtió el martes que Moscú había desviado con éxito el “volumen completo” de las exportaciones de petróleo crudo y productos derivados del petróleo perdidos debido a las sanciones occidentales, según comentarios informados por TASS, una agencia de noticias estatal rusa. Sin embargo, el ministerio espera que la producción rusa de petróleo y gas caiga este año, con la extracción de gas afectada por la falta de compradores europeos, dijo.
Maroo dijo que, dado que las exportaciones de crudo viajan distancias más largas que antes, desde Rusia a India y China, y desde EE. UU. y Medio Oriente a Europa, la “flota de petroleros [es] generalmente más ineficiente”.
“[Eso] significa mayores costos sostenidos de flete para mover el petróleo en todo el mundo”, apuntó.