La central geotérmica de China ubicada a mayor altitud, localizada en la región autónoma del Tíbet, en el suroeste del país, produjo más de 500 millones de kW de electricidad desde su puesta en funcionamiento en 2018.
La central geotérmica de Yangyi, situada en el distrito de Damxung, en la capital regional de Lhasa, es la única planta de su tipo en China en operación comercial.
Utiliza nuevas tecnologías para recargar y reciclar completamente las aguas residuales resultantes de su generación de energía. Cada año, puede ayudar a reducir 420.000 toneladas de emisiones de dióxido de carbono, 6.200 de óxido de nitrógeno, 12.000 de dióxido de azufre y ahorrar 116.000 toneladas de carbón estándar.
Además, tiene una duración media anual de generación energética de 8.700 horas y su suministro estable ha salvaguardado en gran medida el ajuste del pico de provisión eléctrica del Tíbet y el abastecimiento de energía invernal de la región, declaró Sun Jiabin, presidente de la central.
La geotérmica es energía térmica almacenada en la Tierra, limpia y sostenible. Tíbet cuenta con ricos recursos geotérmicos.
La región planea construir una base nacional de energía limpia en el futuro, donde las fuentes geotérmicas desempeñen un papel importante.
La estación de Yangyi también estudió la posibilidad de un proyecto de ampliación. Con una inversión estimada de 480 millones de yuanes (unos 70 millones de dólares), se espera que su fase II ofrezca más escenarios de aplicación en los campos de la calefacción, los invernaderos de hortalizas, la medicina y la sanidad.