Polonia y la República Checa están trabajando para eliminar el petróleo ruso de las refinerías checas, declaró el martes el viceprimer ministro polaco, Jacek Sasin.
“Nuestro objetivo común es diversificar las entregas de crudo lo más rápido posible para eliminar por completo el petróleo ruso como ya hicimos en Polonia”, afirmó Sasin tras reunirse con el ministro checo de Industria y Comercio, Jozef Síkela.
La refinería estatal polaca PKN Orlen manifestó en abril que rescindió un contrato de suministro de petróleo ruso para sus refinerías polacas, pero sus dos refinerías en la República Checa aún dependen del petróleo ruso suministrado a través de la parte sur del oleoducto Druzhba.
Las rutas alternativas incluyen el oleoducto Adria que conecta el puerto croata de Omisalj con Hungría y el oleoducto transalpino (TAL) que conecta Trieste en Italia con las refinerías checas.
PKN Orlen está abierta a la cooperación en materia de suministro de petróleo y gas, así como a la cooperación en energía nuclear con la República Checa, dijo el director general Daniel Obajtek en la sesión informativa en la capital checa.
Pero advirtió que las cuestiones fiscales, incluidos los impuestos sobre las ganancias inesperadas, podrían perjudicar las inversiones en activos de Unipetrol.
“Nuestras inversiones también dependen del enfoque regulatorio del estado checo, no podemos invertir en lugares donde las regulaciones fiscales sofocan nuestra inversión”, indicó Obajtek.