La petrolera estatal brasileña Petrobras alcanzó en mayo una tasa de utilización de refinería del 95%, la tasa mensual más alta desde julio de 2015, anunció la compañía. “En algunos días de la segunda mitad del mes, el nivel incluso superó el 99%”.
El desempeño de mayo se registró incluso con paradas de mantenimiento programadas en RPBC (Cubatão, SP), Refap (Canoas, RS), Reduc (Duque de Caxias, RJ) y Replan (Paulínia, SP). De estos, solo Refap estaba en la lista de ventas del gobierno anterior. El proceso de venta de las refinerías fue suspendido por la actual dirección de la empresa.
El factor de utilización total de la refinación considera el volumen de carga de petróleo efectivamente procesado y la carga de referencia de las refinerías, es decir, su capacidad operativa, respetando los límites de diseño de los equipos, requisitos de seguridad, ambientales y de calidad de los derivados producidos, además de la racionalidad económica de las decisiones de producción. .
Al suspender el proceso de venta, Petrobras realizó la mayor paralización en Refap (RS) este año, de R$ 450 millones, e invirtió R$ 720 millones en RPBC (SP), con servicios que incluyeron la modernización de equipos. La Refinería Abreu e Lima (PE), que también estaba en la lista de ventas, firmó en abril un contrato para la ampliación y modernización de las unidades que ya están en operación.
Una vez concluidas las obras, previstas para el cuarto trimestre de 2024, la refinería contará con un incremento en la capacidad total de procesamiento del Tren 1, de los actuales 115 mil barriles de petróleo por día (bpd) a 130 mil bpd, según lo previsto en el Plan Estratégico 2023-2027.
“La modernización de estas unidades permitirá aumentar la oferta de diésel al mercado brasileño a partir de 2025”, indicó Petrobras.
También recientemente (29/05), Petrobras anunció una inversión de R$ 45 millones en la Refinería de Petróleo Riograndense (Rio Grande, RS), preparando la unidad para ser la primera biorrefinería de Brasil en procesar materia prima 100% renovable.