YPF pretendía aumentar el precio de sus combustibles en un 5%. El presidente Alberto Fernández dejó sin efecto el ajuste “por tiempo indeterminado”.
El domingo YPF había anunciado un incremento del 5% en el precio de sus combustibles, que representaría un aporte de 0,2 punto porcentual en la inflación de enero, de acuerdo con la ponderación del Índice de Precios al Consumidor elaborado por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC).
Sin embargo, el presidente Alberto Fernández evaluó el impacto que tendría la medida sobre la inflación, sobre el resto de las petroleras y sobre el resto de la economía. Si habilitaba el aumento sería el único aumento en el marco del congelamiento de las tarifas de servicios públicos previsto para los próximos 180 días. Aun así el impacto sería fuerte sobre gran parte de las actividades.
En ese contexto, las naftas aparecían como la excepción, pero Fernández tomó la decisión que no se aumenten las naftas “por ahora”.
Hay que destacar que los combustibles ya sufrieron nueve aumentos en lo que va de 2019. Se esperaba que esta primera suba fuera una clara señal a los inversores en Vaca Muerta que su política no será la del congelamiento sino todo lo contrario: la idea es ir convergiendo gradualmente a valores internacionales.
Además, en enero se actualizará el Impuesto a la Transferencia de Combustibles, que también había quedado congelado luego de las PASO.