Los precios del petróleo mantuvieron ayer su tendencia bajista ante la leve calma que ha encontrado el conflicto en medio oriente.
En términos generales, los precios están retrocediendo hacia donde estaban antes del 3 de enero, cuando el ataque de aviones no tripulados de Estados Unidos mató a un militar iraní de alto rango, lo que provocó la represalia de la república islámica contra bases iraquíes que albergan a tropas estadounidenses. Estos eventos llevaron al crudo a su mayor nivel en cuatro meses.
Después de caer un 4,1% el miércoles, los futuros del Brent perdieron 5 centavos a 65,37 dólares por barril. El West Texas Intermediate, en tanto, cayó 7 centavos a 59,56 dólares tras desplomarse casi un 5% el día anterior.
El dato que mostró un incremento en los inventarios en Estados Unidos, informado el miércoles por la Administración de Información de Energía (EIA), sorprendió al mercado, ya de que los analistas pronosticaban una caída de 3,6 millones de barriles.
Durante la sesión, analistas de JPMorgan mantuvieron su pronóstico para el precio del Brent a un promedio de 64,50 dólares por barril durante este año.