El secretario de Comercio Interior, Roberto Feletti, analizó este lunes el dilema que se genera en torno a la fuerte suba del precio de los commodities. Es que, producto de la guerra entre Rusia y Ucrania, el valor de la materia prima está en aumento. Eso podría generar, por un lado, un mejor panorama en las exportaciones nacionales y la recaudación. Sin embargo, si no se toman las políticas necesarias, la suba podría trasladarse rápidamente al mercado interno.
Así lo expresó, claramente, el funcionario en AM750: “En este contexto, lo que más me preocupa es la disparada del precio del trigo a niveles internacionales. La tonelada de 280 dólares a 490 que pasó estos días. Es un impacto muy grande”.
Feletti, advirtió este lunes que si el conflicto entre Rusia y Ucrania, que ya cumple 12 días, continúa “el desabastecimiento alimenticio en el mundo puede ser importante”.
Por ello, el funcionario explicó que —ante los diversos aumentos de precios por las sanciones y la escasez provocadas por el conflicto bélico— “la política antiinflacionaria es fundamental para proteger los ingresos populares”.
Feletti detalló que la Secretaría debe “establecer ciertas anclas en los índices de inflación como la canasta de precios cuidados, el fideicomiso del trigo para asegurar el precio de la harina 000 en góndola, el precio de los paquetes de fideos, el fondo de estabilización de papa, cebolla y tomate”.
Si bien reconoció que “es una buena noticia que suban los precios (de los productos) que la Argentina exporta”, afirmó que “tiene que preservarse el consumo interno, la armonía social es importante en un plan de negocios también”.
Al respecto, añadió que “el impacto de la inflación local se puede paliar con medidas como la canasta de precios cuidados, pero la inflación internacional requiere otro tipo de medidas, porque las que hay pueden ser insuficientes”. En este sentido, remarcó que se encuentra debatiendo medidas con el ministro de Economía, Martín Guzmán, y con el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas.
Reunión con panaderos y molineros
En esa línea, anticipó que este mediodía se reunirá con los panaderos y molineros porque “hoy el fideicomiso para asegurar el precio de la harina y los fideos, es insuficiente frente a esta suba de precios”. Y agregó: “Hace unos 20 días habíamos pactado un precio del pan en un rango de 220 a 260 el kilo, con una bolsa de harina a 1300 pesos. Hoy ese acuerdo se está resquebrajando”.
Las retenciones
Consultado por la judicialización de las retenciones por parte de la Mesa de Enlace con la Sociedad Rural Argentina, consideró que “eso muestra la insolidaridad con los argentinos porque si las retenciones son 0, el precio del pan va a determinarse a precio internacional, pero nadie en Argentina gana los salarios a precios internacionales”.
Y concluyó: “Pensar que se puede consumir pan con el precio del trigo a casi 500 dólares la tonelada, sin ningún mecanismo de desacople de precio interno, es decirle a la gente ‘no pueden comer pan’, que es la polémica que pasó con la carne”.