El Fondo Monetario Internacional (FMI) reflejó el impacto de la sequía en su proyección sobre la economía argentina, y evaluó que tendrá una caída del 2,5% del PBI en 2023.
El organismo multilateral de crédito señaló que la economía se recuperará en 2024, con un crecimiento estimado de 2,8%.
En abril, la entidad había planificado una reducción de la economía en torno al 0,2%, por lo que la nueva medición de mitad de año supera de modo significativo los augurios iniciales, en particular debido a la grave sequía.
En tanto, respecto de la variación de precios, indicó que la inflación alcanzará el 120% en todo el 2023, más de treinta puntos porcentuales más que lo estimado en abril.
Las proyecciones del organismo que conduce Kristalina Georgieva forman parte del Informe de Perspectivas Económica Mundiales, el cual marcó un leve descenso de la inflación a nivel global.
“Está cediendo en la mayoría de los países pero sigue siendo alta, y se observan divergencias de un país a otro y en la forma de medirla”, señaló el informe difundido hoy en Washington, que marcó una suba de precios promedio global de 6,8%.
Al mismo tiempo que sostuvieron una desaceleración del crecimiento mundial de 0,5% este año en relación al 2022. “Las economías avanzadas siguen siendo la causa principal del descenso del crecimiento entre 2022 y 2023”, explicó el FMI.
Para las economías emergentes y en desarrollo estimó que el crecimiento llegará a 4% en 2023 y 4,1% en 2024; por caso, proyectó que en América latina y el Caribe, el PBI caerá de 3,9% en 2022 a 1,9% en 2023, y del 2,2% en 2024.
Por su parte, el FMI estimó que en Brasil se espera un aumento del PBI de 2,1% este año, explicado principalmente por la producción agrícola.