La refinería que operó entre el 2000 y 2016 fue recientemente adquirida por un fondo de inversión americano y Kalpa Group.
Fox Petrol dedicada a la refinación de crudo en la localidad neuquina de Senillosa retomará su producción en mayo tras la compra de sus acciones por parte de un fondo de inversión estadounidense y Kalpa Group, de capitales nacionales.
Voceros de la compañía informaron que la refinería ubicada en una zona estratégica para la industria, se pondrá nuevamente en marcha a partir de mayo con una producción incremental que apuntará al mercado local y regional.
La refinería que operó entre el 2000 y 2016 fue recientemente adquirida por un fondo de inversión americano y Kalpa Group.
Su planta cuenta con una capacidad de procesamiento de 10.000 M3/mes, y está especialmente diseñada para el procesamiento de condensados para la producción de naftas, gasoil y GLP.
De acuerdo a los nuevos operadores, para retomar sus actividades productivas en mayo, la planta se encuentra actualmente en un proceso de puesta a punto de los equipos.
La planta está ubicada en el parque industrial de la localidad de Senillosa, a 33 kilómetros de la ciudad de Neuquén, sobre la margen izquierda del río Limay.
“Esta posición otorga una enorme injerencia en una zona productiva ubicada en el sudeste de la provincia, en el límite con Río Negro y La Pampa, formando parte del Yacimiento Vaca Muerta, la principal formación de petróleo y gas shale”, explicaron en la empresa al dar detalles del anuncio.
Según informó el nuevo Gerente General de Fox, Ignacio Barousse ”la puesta en marcha se dará en un breve lapso, y permitirá sumar una alternativa para la evacuación del crudo de la Cuenca Neuquina”.
Incluso, los nuevos operadores ya estuvieron conversando con los ex operarios de la planta que manifestaron su entusiasmo ante la propuesta de reincorporarse rápidamente a la actividad.
Fox Petrol inició su actividad comercial e industrial en el procesamiento de hidrocarburos agregando valor en origen en el 2000 y la destilería estuvo en pleno funcionamiento hasta 2016.
La destilería se caracterizó por su capacidad para abastecer al mercado local y regional de combustibles, como también por la exportación de solventes no solo al Mercosur sino también a mercados como Estados Unidos y Europa.