El presidente y aspirante a la reelección Emmanuel Macron y su contrincante Marine Le Pen sufragaron en el norte de Francia rodeados por decenas de simpatizantes. Los ciudadanos eligen este 24 de abril entre dos visiones opuestas de Francia y su rol en la escena internacional. Según Ipsos, la tasa de abstención se sitúa en 28%, ligeramente más alta que en 2017.

La participación en la segunda vuelta de las presidenciales francesas alcanzó 63,2 % del censo a las 05:00 p.m., a dos horas de que cierren los primeros centros de votación, lo que supone casi dos puntos menos que en la primera vuelta el 15 de abril.

En la segunda vuelta de 2017, cuando se repitió el duelo actual entre el liberal Emmanuel Macron y la ultraderechista Marine Le Pen, la participación fue de 65,30 % a la misma hora.

Sobre la base de las cifras oficiales, las encuestadoras estimaron que la tasa de abstención se acercaba a 28 %, lo que de confirmarse sería la más alta en una segunda vuelta de las elecciones presidenciales desde 1969.

Los analistas también han advertido que la baja participación podría cambiar el resultado final en cualquier dirección, a pesar de que las encuestas le dan a Macron una cómoda ventaja sobre Le Pen en las últimas dos semanas.