El Opus Dei dejará de estar blindado a partir del 4 de agosto, según refirió Jorge Bergoglio, el papa Francisco. La publicación del motu proprio (documento papal) titulado “Ad charisma tuendum” (Para proteger la carisma) rompe 40 años de protección a la todavía prelatura católica.

Así, el papa Francisco adapta al Opus Dei a la nueva Constitución de la Curia vaticana Praedicate evangelium, que entró en vigor el último 5 de junio. La máxima cabeza del Vaticano considera “necesaria”, como se lee en el escrito, “una forma de gobierno basada más en el carisma que en la autoridad jerárquica”.

La legislación de Francisco contradice a la de su antecesor Juan Pablo II, principal valedor del Opus Dei, que lo erigió como prelatura personal el 28 de noviembre de 1982 con la Constitución Ut sit. Fue entonces cuando la volvió una institución eclesiástica regida por un prelado con su propia jurisdicción, como una diócesis, pero sin estar vinculada a un territorio determinado.

Cambios

El Opus Dei pasa de estar controlado por la junta de obispos al ministerio del Clero, como varias otras organizaciones. De igual forma, deberá presentarse anualmente al “dicasterio para el Clero un informe sobre el estado de la prelatura y sobre el desarrollo de su labor apostólica”.Asimismo, el prelado no podrá ser obispo ni tendrá permitido portar los ropajes ni el anillo episcopal. El papa Francisco argumenta que con las medidas desea “salvaguardar el carisma del Opus Dei y promover la acción evangelizadora que sus miembros llevan a cabo en el mundo, y debiendo al mismo tiempo adaptar las disposiciones relativas a la prelatura a la nueva organización de la curia romana”.