La organización benéfica de derecho ambiental ClientEarth presentó una demanda contra los directores individuales del gigante petrolero Shell.

La organización benéfica alega que los 11 directores incumplieron sus deberes legales, en virtud de la Ley de Sociedades del Reino Unido, al no adoptar una estrategia de transición energética que se alinee con el Acuerdo de París .

La demanda, presentada el 8 d febrero ante el tribunal superior de Inglaterra y Gales, recibió el apoyo de inversores institucionales que poseen más de 12 millones de los 7.000 millones de acciones totales de Shell. Estos equivalen a más de medio billón de dólares estadounidenses en activos totales bajo administración e incluyen fondos de pensión en el Reino Unido, Francia, Bélgica, Dinamarca y Suecia.

Mark Fawcett, director de inversiones del fondo de pensiones del Reino Unido Nest, indicó: “Los inversores quieren ver acciones en línea con el riesgo que presenta el cambio climático y desafiarán a aquellos que no están haciendo lo suficiente para hacer la transición de su negocio. Esperamos que toda la industria energética se siente y tome nota”.

ClientEarth dijo que esta es la primera demanda, presentada por accionistas, que alega que una empresa no se está alejando adecuadamente de los combustibles fósiles. La organización benéfica tiene una pequeña participación accionaria en Shell, lo que le permite presentar una demanda contra ellos en virtud de la Ley de Sociedades.

El abogado sénior de ClientEarth, Paul Benson, sobre la demanda: “la junta [de Shell] persiste con una estrategia de transición que es fundamentalmente defectuosa, lo que deja a la empresa seriamente expuesta a los riesgos que el cambio climático representa para el éxito futuro de Shell, a pesar del deber legal de la junta. para gestionar esos riesgos”.

En una respuesta a Offshore Technology, Shell rechazó las acusaciones de ClientEarth y afirmó que la empresa “cree que nuestros objetivos climáticos están alineados con el […] Acuerdo de París”. La declaración continuó diciendo que Shell “se opondrá a la solicitud [de ClientEarth] para obtener el permiso del tribunal para continuar con este reclamo” y que “el grupo de inversionistas institucionales que poseen colectivamente más de 12 millones de acciones […] representan menos del 0.2% del total de Shell base de accionistas.”

La demanda se produce una semana después de que las ganancias anuales récord de Shell generaran críticas en el Reino Unido.

El 1 de febrero , Global Witness, una organización sin fines de lucro , acusó a Shell de etiquetar incorrectamente sus inversiones. La denuncia , presentada ante la Comisión de Bolsa y Valores de EE. UU., afirma que en 2021 Shell solo gastó el 1,5 % (288 millones de dólares) de su gasto de capital en generación de energía solar y eólica, en lugar del 12 % que anunciaba. Global Witness también alegó que la mayor parte del gasto de Shell en “Soluciones de energía y renovables” se destinó a actividades relacionadas con el gas.

Shell negó haber etiquetado incorrectamente sus inversiones y sigue confiando en que sus divulgaciones financieras cumplen con las regulaciones estadounidenses.