En tres años se destruyeron 8.300 puestos de trabajo en todo el país. En la Cuenca del Golfo San Jorge la pérdida alcanzó a 6 mil obreros.
Las estadísticas del SIPA (Sistema Integrado Previsional Argentino) que depende de la Secretaría de Trabajo de la Nación muestran que, en el segundo trimestre de 2018, los obreros petroleros activos en el país son 60.596, cifra que significó un ascenso respecto de los 57.907 que se habían registrado en el mismo trimestre de 2017.
Según informó El Extremo Sur, la suba interanual no fue muy significativa e inclusive estuvo por debajo de los datos que se habían informado en el segundo trimestre de 2016, con 62.835 obreros en actividad, y fue marcadamente menor a los 66.839 trabajadores registrados en el segundo trimestre de 2015.
El impulso que le viene dando Vaca Muerta a la explotación de los hidrocarburos no convencionales logró desacelerar las consecuencias expulsivas de trabajadores que viene generando la combinación de la crisis internacional del precio del petróleo, el ajuste de las operadoras petroleras y las políticas recesivas del Gobierno nacional.
BAJAS EN CHUBUT Y SANTA CRUZ
Entre las regiones productivas del país, la Cuenca del Golfo San Jorge ha sido la más impactada por los despidos y los empleos destruidos en el sector petrolero. Desde el segundo trimestre de 2015 hasta el mismo período del año pasado se perdieron 6.064 empleos en el sur de Chubut y el norte de Santa Cruz.
La peor parte de la crisis ocupacional en el petróleo se la llevó Santa Cruz con un total de 3.528 empleos menos en tres años, incluyendo los generados en el extremo sur que conforma la Cuenca Austral pero con mucha menor incidencia. La mayor cantidad de despidos santacruceños se observó en el último año, con casi 1.500 empleos menos.
En Chubut el achicamiento de los puestos de trabajo petroleros fue de 2.536 en tres años y tuvo su peor tránsito al inicio de la crisis del precio del barril, desacelerándose en los años posteriores con 1.000 empleos destruidos entre 2015 y 2016, para luego descender a solo 600 entre 2017 y el 2018.
Aunque Vaca Muerta permitió crear 1.700 nuevos puestos de trabajo en el sector petrolero de Neuquén, el saldo de los últimos tres años arroja resultados negativos, con una retracción de 1.381 puestos de trabajo. En el segundo trimestre de 2015 había en Neuquén 20.793 petroleros y en el mismo período del año pasado dicha cantidad fue solamente de 19.412 trabajadores.