La barra de Vélez increpó a algunos futbolistas del Fortín, tras la derrota ante Huracán, que dejó al club de Liniers al borde del descenso. Leonardo Jara, fue interceptado y amenazado.
“Me agarraron afuera de la Villa Olímpica. Me cruzaron un auto, me agarraron de la campera y querían que me baje. Me dijeron que me iban a pegar un par de tiros en las patas”, señaló el defensor al periodista partidario Agustín Palacios.
El Fortín vive una crisis futbolística e institucional, que se profundizó este domingo, tras la caída en Parque Patricios. El conjunto dirigido por Sebastián Méndez quedó apenas dos puntos por encima de Huracán y Colón, quienes están en el último puesto en la lucha por la permanencia.
En ese marco, la barra brava del Fortín decidió apretar a los futbolistas y los interceptó en la Villa Olímpica, donde muchos de ellos habían dejado sus autos y sus pertenencias.
Además, de Jara, hubo otros futbolistas que también fueron increpados por los violentos. Gianluca Prestianni, la joya de las inferiores, y Juan Ignacio Méndez, el volante proveniente de San Lorenzo, también fueron agredidos y habrían pedido irse del club.
No es la primera vez que ocurre un hecho de este estilo. En mayo de este año, la barra se metió a la fuerza en la Villa Olímpica y apretó al plantel. En aquella oportunidad rompieron la barrera y fueron a buscar a los referentes del equipo. Cuando todavía dirigía Ricardo Gareca, los hinchas habían pedido mayor compromiso ante la complicada situación.
Con ciertas similitudes a esta ocasión, en aquella oportunidad 12 integrantes de “La Pandilla de Liniers” se acercaron en tres autos e irrumpieron en el predio de Ituzaingó.