“Pitty”, como se la conoce, explicó que prestó servicios al banco y cobró $240.000 al mes. Esto se da en medio del escándalo contra Silvina Batakis, la titular de la entidad que es investigada por contrataciones no autorizadas y el pago de sueldos millonarios a familiares.

Se llama Verónica Laura Asad, conocida como “Pitty, la numeróloga”. El Banco Nación la contrató para que dictara un “curso de couching” y le pagó $ 1.800.000. Lo confirmó la propia protagonista de la historia, quien aclaró que no conoce a Silvina Batakis, directora del organismo.

“Me pagaron poco, encima”, afirmó hoy en el programa de Jorge Lanata y agregó: “Porque si se fijan en mi página, soy carísima. Porque me preparé. No soy solamente una numerólga que hizo un cursito”.

Een el programa PPT que conduce Jorge Lanata, se reveló una serie de medidas de Batakis (contratacios polémicas y sueldos altos) entre las que está “Pitty, la numeróloga”.

“Tengo una técnica matemática, porque soy matemática. Tengo facilidad para sumar tres, cuatro cifras desde que tengo seis años. Fui aprendiendo una técnica, estudié en muchos lugares, en los cuales después, para complementar eso, estudié docencia, estudié coaching… Estudié de todo. Lo que hago es una especie de coaching, donde vos venís y, através de la matemática pura, yo te voy sumando, te voy desarrolando y te voy diciendo dónde estás parada. Y te doy diferentes tips de motivación para que puedas sacar tu mejor versión en tu trabajo”, explicó este lunes en el programa de Lanata en Radio Mitre.

“Es una cosa que está muy de moda, pero que yo vengo haciendo desde hace muchos años. Como tengo una carrera de muchos años, mucha gente del medio me conoce. Soy muy rápida. Mi consulta dura muy poco. Pero en este caso (por el Banco), cuando me contratan las empresas, es otro el servicio”, describió.

Asad confirmó que había facturado $ 1.800.000 por un trabajo que duró seis meses. ($ 300.000 por mes).

Según se publicó en PPT, todas las sesiones estuvieron destinadas a María del Carmen Barros, gerenta general del Banco Nación, quien asistía a su consultorio personal. “Ella vino una vez a la semana, después vino dos veces a la semana, después vino tres veces a la semana”, afirmó.

El pedido que le realizaron desde el Banco Nación quedó más claro cuando Jorge Lanata le consultó si la habían contratado para saber cómo tenía que gestionar Barros y en qué meses tenía que tomar decisiones.

“Exactamente, me pidieron que la pueda coachear y desarrollar todo el servicio de los números que es el que yo doy”, respondió.

“Es muy fácil, yo tengo la facturación y todas las facturas, por lo menos de lo que están correlativas de mi trabajo que yo hice por seis meses. Tengo todos los mails con las comunicaciones que tuve”, cerró.