Los ministros de Agricultura, Pesca y Alimentación de la Unión Europea reclaman este lunes “instrumentos y financiación” para hacer frente a los efectos y consecuencias del cambio climático en el sector agroganadero ya que las actuales adversidades, superan la capacidad de respuesta de la reserva de crisis.
“La reserva agrícola ha jugado un papel positivo, pero ahora tenemos otro reto que es el cambio climático, un tema totalmente diferente que, combinado con la situación del mercado, puede ser difícil de abordar”, reconoció el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación en funciones, Luis Planas, durante la rueda de prensa posterior a la reunión que ha dirigido en el marco de la presidencia española del Consejo.
El ministro ha advertido de que es necesario “hacer frente a una nueva situación” al tiempo que ha instado a “ser lo suficientemente inteligentes para adaptarse a la situación y perfilar los medios necesarios para afrontarla “con los ojos abiertos”.
“Necesitaremos instrumentos y dinero”, remarcó Planas. También el comisario europeo de Agricultura, Janusz Wojciechoswski, ha reconocido la necesidad de “reforzar el mecanismo de apoyo a los agricultores” y ha abierto la puerta a ofrecer ciertas “flexibilidades” a la reserva de crisis como ya se hizo durante la pandemia, cunado el dinero no utilizado se transfirió a los agricultores afectados por el virus.
“Deberíamos considerar muy seriamente la posibilidad de dar más flexibilidad a los Estados miembros para que utilicen una parte limitada del presupuesto en situaciones de crisis”, ha admitido, aunque ha apuntado que a pesar de que el tiempo apremia, porque la ayuda se necesita “urgentemente”, ha recordado que los procedimientos de la Comisión “llevan su tiempo”.
Aunque la reserva de crisis de la Política Agraria Común (PAC) está pensada para fenómenos de mercado, tanto los Veintisiete como Bruselas han reconocido que las adversidades climáticas como sequías o inundaciones, entre otras, se están convirtiendo en un problema “sistemático” que supera la capacidad de respuesta de este fondo. A esas contingencias climáticas se suman también la situación geopolítica en Oriente Medio y la invasión de Ucrania por parte de Rusia, que además mantiene el bloqueo a las exportaciones de cereal ucraniano a través del mar Negro.
La lucha contra el cambio climático y sus efectos en el sector agroalimentario en la UE y a nivel mundial
El aumento de las temperaturas y los fenómenos extremos (especialmente las sequías) son cada vez más comunes, y los responsables europeos han debatido cómo afrontar estas situaciones.
Encontrar soluciones a desafíos como estos pasa por buscar nuevas tecnologías que, por ejemplo, permitan un uso mejor y más eficiente de los recursos hídricos, con técnicas innovadoras para hacer frente a las menores precipitaciones.
Técnicas genómicas
Las nuevas técnicas genómicas (NTG) , que permiten cultivar variedades de plantas más resistentes y resistentes de forma rápida y con mayor precisión.
“Durante el debate se destacó el potencial de las nuevas técnicas genómicas aplicadas al mejoramiento de nuevas variedades vegetales para enfrentar el desafío de la sostenibilidad de la producción de alimentos y, en particular, para enfrentar el desafío del cambio climático y la necesidad de reducir el uso de fitosanitarios. productos y fertilizantes”, añadió el ministro español.