Para facilitar las conexiones de gas natural en los hogares de Arequipa, Moquegua y Tacna se implementará el programa Bonogas, que ha financiado, a la fecha, las conexiones a más de un millón 200,000 viviendas en ocho regiones.

Uno de los compromisos asumidos por el Gobierno, ratificado en el último Mensaje a la Nación de la presidenta Dina Boluarte, es garantizar que el gas natural llegue a todos los hogares del país beneficiando a las familias con un combustible económico, eficiente y amigable con el medioambiente.

Hasta hoy, este recurso energético con el que cuenta el Perú ha llegado a miles de hogares de Lima, la costa central y costa norte; sin embargo, son especialmente las poblaciones del sur del país las que siguen esperando la oportunidad de disponer de este recurso que mejore sus condiciones de vida.

Los frustrados intentos para masificar el gas natural y las investigaciones en curso que conocemos no pueden seguir postergando el legítimo derecho de esas miles de familias de contar en sus viviendas con una energía de bajo costo.

Ese anhelo histórico comienza a hacerse realidad con la reciente suscripción de un convenio entre el Ministerio de Energía y Minas y la Agencia de Promoción de la Inversión Privada (ProInversión), que permitirá, en una primera etapa, que más de 12,000 hogares de Arequipa, Moquegua y Tacna accedan al gas natural.

En virtud del convenio, firmado el último lunes en presencia de la Jefa del Estado, ProInversión desarrollará los estudios técnicos, el informe de evaluación y el proceso de promoción del proyecto de masificación del uso de gas natural y distribución por red de ductos, a efectos de que sea ejecutado mediante la modalidad de asociaciones público-privadas.

La distribución del gas natural en Arequipa, Moquegua y Tacna solo es el inicio de una estrategia mucho más amplia, pues la meta es llegar a todo el sur del Perú con el suministro permanente de un recurso que genera un ahorro de 50% en comparación con el gas licuado de petróleo o balón de gas convencional.

Es importante recordar que el gas natural no solo es un insumo básico para los hogares, sino que también alcanza a los comedores populares, locales de apoyo social, centros de salud, colegios, industrias, pequeñas y medianas empresas. Además, puede ser usado en el transporte vehicular, lo que reduciría de manera sustantiva el costo del combustible.

Para facilitar las conexiones de gas natural en los hogares de Arequipa, Moquegua y Tacna también se implementará el programa Bonogas, que ha financiado, a la fecha, las conexiones a más de un millón 200,000 viviendas en ocho regiones gracias al Fondo de Inclusión Social Energético.

Con estas medidas, el Gobierno avanza en su objetivo de cerrar las brechas sociales y en hacer viable un sueño de décadas: el de establecer conexiones de gas natural en cada hogar del sur para que las familias, sobre todo las más vulnerables, compartan los beneficios del crecimiento y del progreso.