Entre los meses de enero y septiembre, la producción de petróleo en Chubut se incrementó en un 7% con respecto al mismo periodo del año pasado. Mientras que la producción de gas bajó un 3% en los últimos siete mes.
Según el informe de la Secretaría de Energía, la producción de petróleo en Chubut se incrementó un 7% en el período enero a septiembre con respecto al mismo periodo del año pasado.
Los datos fueron consultados por ADN Sur y el incremento equivale a más de 2,6 millones de barriles adicionales. La contra cara sigue siendo la extracción de gas, que mantiene una tendencia negativa del 3%.
Los registros oficiales dan cuenta de que entre enero y septiembre de este año la producción de petróleo en Chubut alcanzó 6,4 millones de metros cúbicos, lo que representa un incremento frente a los casi 6 millones de metros cúbicos totalizados en igual lapso del año pasado. La diferencia positiva supera los 400 mil metros cúbicos, lo que representa alrededor de 2,6 millones de barriles de petróleo.
Así, la producción petrolera de la provincia muestra una tendencia de recupero, aunque todavía no alcanzó los niveles del año 2016, cuando la producción de crudo en ese lapso de enero a septiembre había sido de 6,6 millones de metros cúbicos. En 2015 fue el registro más alto, con 6,9 millones, mientras que en 2014, cuando empezó la crisis de precios, había sido de 6,7 millones de metros cúbicos en esos 9 meses.
EL GAS, EN BAJA
La producción de gas cayó un 3% en relación al año pasado. Se ubicó en 2.500 millones de metros cúbicos, lo que si bien es un retroceso en relación al año pasado, no está tan lejos de los niveles de los años anteriores, por lo que la fluctuación en este caso no ha sido tan marcada como ocurrió con el petróleo.
En este caso, la situación parece obedecer a razones de mercado combinadas con la política energética nacional: hay una sobre oferta de gas y los mejores precios los recibe el fluido proveniente de áreas no convencionales, ubicadas en Neuquén y el sur de Santa Cruz, por lo que la producción gasífera de áreas convencionales no encuentra hoy perspectivas para un incremento de la producción.