La patronal gasista Sedigas ha abogado este martes por que la revisión del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (Pniec) eleve el objetivo de producción de biometano hasta un mínimo del 10-13 % del consumo del gas natural, en línea con lo que plantea Bruselas.

En la rueda de prensa previa a la reunión anual de Sedigas, el presidente de la asociación, Joan Batalla, ha urgido además a que se reconozca el papel de los ciclos combinados, “única tecnología que está aportando la flexibilidad que requiere el sistema eléctrico” al ser capaz de generar inmediatamente electricidad a partir de gas.

En esta línea, Batalla cree oportuno una reflexión de los mecanismos retributivos de estos ciclos, los cuales “no están recuperando sus costes variables de operación”, a pesar de ser “imprescindibles para el funcionamiento correcto del sistema eléctrico”.

De acuerdo con las cifras que maneja la asociación, el 25 % de la electricidad consumida en España en 2022 fue generado por ciclos combinados, un porcentaje que subió hasta el 30 % en la media registrada entre los meses de junio y septiembre, los de mayor demanda por las altas temperaturas.

En palabras de Batalla, la contribución del 25 % “es la participación más elevada desde 2010”, es decir, “en los últimos doce años, los ciclos combinados habían estado en cifras ligeramente inferiores pero no habían llegado a ese hito”.

Para el presidente de Sedigas, la revisión del Pniec “debe reconocer el papel de los ciclos combinados”, los cuales “ocupan y seguirán ocupando un papel protagonista”, máxime teniendo en cuenta la aportación de las renovables eléctricas, “intermitentes, caracterizadas por la volatilidad y no disponibilidad y firmeza en todos los momentos y en todas las horas del día”.

Así, el sector ha reivindicado la necesaria implementación de unos mercados de capacidad para garantizar la viabilidad económica de esta tecnología.

GASES RENOVABLES PARA DESCARBONIZAR

Mención especial ha dedicado Sedigas al despliegue de los gases renovables, cuya incorporación se beneficiará de los cerca de 100.000 kilómetros de red de transporte y distribución, hasta ocho millones de puntos de suministro y de una “gran capacidad” de almacenamiento y regasificación que convierten al sistema gasista nacional en una de las infraestructuras más resilientes de Europa.

La asociación entiende que el Pniec debe dar un impulso al biometano que contribuya a ofrecer una respuesta adecuada a los objetivos de descarbonización, garantizar un suministro energético competitivo y asequible, y consolidar la posición de España como referente europeo en el despliegue de gases renovables.

A tenor del estudio elaborado por Sedigas en colaboración con PwC y Biovic, la capacidad de generación de biometano en España es de 163 teravatios hora (TWh), equivalentes al 45 % de la demanda anual de gas natural.

A este tema también se ha referido la secretaria de Estado de Energía, Sara Aagesen, que ha insistido en abordar la transición energética en todos los vectores, lo que incluye unos gases renovables que “van a ser indispensables” en la descarbonización de la economía y de los procesos productivos.

Aagesen ha recalcado que los gases renovables ya estaban en la redacción original del Pniec, y ha avanzado que “muy pronto” se publicará un borrador actualizado de este marco, que ha de remitirse a Bruselas, como muy tarde, este viernes, 30 de junio.

En cualquier caso, ha aclarado, en el plan, que será más ambicioso, se han considerado aspectos como las hojas de ruta tanto del biogás como del hidrógeno, cuyas expectativas “se han superado”.