El terremoto más mortífero que ha azotado Marruecos en más de un siglo ha matado a más de 1.000 personas y ha dejado destrucción a su paso.
De acuerdo con el boletín de alerta sísmica difundido por el Instituto Nacional de Geofísica marroquí, el movimiento se produjo a las 23:11 hora local y tuvo su epicentro en la localidad de Ighil, situada 63 kilómetros al suroeste de la ciudad de Marrakech, a una profundidad de 8 kilómetros.
Las carreteras están bloqueadas por escombros y el terreno montañoso dificulta el trabajo de los rescatistas.