Consideran que tres de cada cinco bocas de expendio trabaja a pérdida y advierten que si no pueden acceder al programa, se puede agudizar su situación.
“La situación de las estaciones de servicio sigue siendo crítica, y no muestra signos de mejorar en el corto plazo”, afirmó la Confederación de Entidades Comercializadoras de Hidrocarburos y Afines (CECHA), en un comunicado en el que reproduce argumentos enviados en una nota al ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas.
La entidad mostró su preocupación por “una situación que puede llevar al cierre de cientos de estaciones”, al asegurar que “hoy 3 de cada 5 trabajan a pérdida y la situación puede ser peor si son excluidas del programa de Asistencia al Trabajo y la Producción”.
“La caída de la circulación a nivel masivo, sumado a las restricciones por el COVId-19 derivaron en una nueva normalidad cuyos volúmenes de ventas son angustiantes, por eso 3 de cada 5 estaciones no logran cubrir los gastos operativos y trabajan a pérdida”, resaltó CECHA.
A partir de este mes, los subsidios para el pago complementario de salarios que prevé el ATP está disponible solamente para sectores considerados críticos como turismo, gastronomía, transporte, cultura y salud, tal como anunció semanas atrás el Gobierno.
“Desde el comienzo de la pandemia, las Estaciones fueron consideradas un servicio “esencial” y continuaron operando de manera normal, aún con una circulación restringida que hizo desplomarse las ventas más de un 70 por ciento en el primer mes de cuarentena”, expresaron.
Durante los meses de pandemia los estacioneros “fueron recurriendo a distintas formas para mantener a flote el negocio, tales como sacar créditos, poner dinero de su bolsillo e incluso vender bienes personales para no atrasarse con el pago al personal” por lo que “la quita del ATP cae en un momento en el cual el sector ya casi no tiene recursos”.
De acuerdo a datos elaborados por la consultora Economic Trends, una estación de servicios con 13 empleados necesita vender al mes unos 300,000 litros de combustible para alcanzar su “punto crítico”, es decir, el mínimo para cubrir todos los costos.
Actualmente el 67.6% de las estaciones de servicio del país registró en el último mes volúmenes de ventas de combustibles líquidos por debajo de ese nivel.