Japón enfatizará la importancia de la inversión en gas natural, gas natural licuado y combustibles más limpios como el hidrógeno y el amoníaco durante su presidencia del G7 este año.
Japón, presidente de la agrupación de países ricos para 2023, celebrará una reunión ministerial sobre clima, energía y medio ambiente en la ciudad de Sapporo los días 15 y 16 de abril, antes de la cumbre principal del G7 en la ciudad de Hiroshima del 19 al 21 de mayo.
Japón espera que los mercados mundiales de energía se mantengan ajustados durante años y “enfatizaría la inversión en gas natural, GNL, hidrógeno y amoníaco”, anuncióen una conferencia Takeshi Soda, director de la división de petróleo y gas natural del Ministerio de Economía, Comercio e Industria.
Soda señaló que Japón depende del gas superenfriado del proyecto Sakhalin-2 de Rusia y necesitaría al menos varios años para encontrar un sustituto.
Rusia ordenó una reorganización de los accionistas de Sakhalin-2, incluido Japón, en represalia por las sanciones occidentales por su invasión de Ucrania hace un año. Rusia llama a su intervención una “operación militar especial”.
Japón impuso sus propias sanciones a Rusia pero aún compra su GNL, obteniendo casi el 10% de las importaciones anuales de GNL de Sakhalin-2.
Con una autosuficiencia energética de solo el 11%, el nivel más bajo de los miembros del G7, Japón ve un riesgo en volverse aún más dependiente de Rusia si las perspectivas de producción de gas natural en los Estados Unidos no se materializan, indicó Soda.
El Ministerio de Economía, Comercio e Industria planea lanzar el llamado GNL de amortiguamiento estratégico (SBL), similar a sus reservas estratégicas de petróleo, que se encuentran entre las más grandes del mundo.
Todavía tiene que establecer detalles sobre cómo asegurará los suministros a través de acuerdos a corto y largo plazo. Tampoco identificó una empresa para manejar las compras de GNL.
En caso de emergencia, la empresa elegida vendería GNL de SBL a las empresas de servicios públicos para evitar la interrupción del suministro y la empresa estatal JOGMEC intervendría para cubrir cualquier pérdida en la que pudiera incurrir la empresa, según una presentación que realizó Soda.
Si los suministros de GNL de Rusia se interrumpen antes de que se pueda establecer el SBL, Tokyo Gas, uno de los principales compradores de GNL de Japón, compraría en el mercado al contado o en sus otros acuerdos a largo plazo, y también podría pedirles a los clientes que reduzcan el consumo, Atsunori Takeuchi, ejecutivo y gerente general sénior del negocio de GNL de Tokyo Gas, declaró en la conferencia.