Chevron se convertirá en el accionista mayoritario del proyecto de la mayor planta de hidrógeno ‘verde’ del mundo. El movimiento refuerza la búsqueda de las grandes petroleras de invertir en tesis vinculadas a la transición energética.
Chevron New Energies compró una participación del 78% en el proyecto Advanced Clean Energy Storage (ACES) en Utah, a Haddington Ventures, una firma de capital privado con sede en Houston. Los términos del acuerdo no fueron revelados.
El sitio proporcionará inicialmente más de 300 gigavatios hora de energía limpia al oeste de EE. UU. y ayudará a estabilizar la red cuando la generación eólica y solar experimente inestabilidad. ACES obtuvo un préstamo de 504 millones de dólares del Departamento de Energía de EE. UU. (DOE) el año pasado y actualmente se encuentra en desarrollo. La finalización de las obras está prevista para mediados de 2025.
La inversión indica que las principales compañías petroleras están comprometidas con proyectos que apuntan a reducir las emisiones de carbono fuera de sus negocios tradicionales. A principios de este año, Exxon Mobil compró la red más grande de tuberías de CO2 en Estados Unidos, mientras que Occidental Petroleum está construyendo la planta más grande del mundo para eliminar el dióxido de carbono directamente de la atmósfera.
Chevron planea gastar 10 mil millones de dólares en inversiones bajas en carbono durante ocho años, tanto para reducir sus propias emisiones como para expandir la producción de energía limpia. Para la petrolera, la inversión en ACES proporciona una “plataforma de crecimiento para el futuro” que podría utilizar el hidrógeno para la generación de energía, el transporte pesado o incluso reemplazar el hidrógeno basado en combustibles fósiles en sus propias refinerías, indicó Austin Knight, vicepresidente de Chevron. Nuevas Energías.